El corazón delator desde el punto de vista de los oficiales

A mis compañeros y a mí nos llegó una denuncia de un vecino, creímos que se podía tratar de un atentado, por lo cual fuimos a inspeccionar el lugar.

Nos presentamos como policías, queríamos pasar a registrar el lugar, el vecino nos dió la bienvenida a la casa y nos explicó que él había gritado durante la pesadilla. Nos llevó a  recorrer la casa y nos invitó a revisar bien, fuimos hasta el cuarto del muerto, nos mostró como los caudales estaban intactos y como cada cosa estaba en su lugar.

Nos trajo dos sillas y nos pidió que nos sentáremos, ya estábamos satisfechos, nos hallábamos perfectamente cómodo, nos sentamos y empezamos a conversar sobre cosas comunes, él nos contestaba con ánimo, luego de pasar un rato, se empezó a poner a poner pálido, empezó a hablar en voz alta.

Empezamos a notar que se balanceaba en la silla y estaba nervioso e iba de un lado para el otro, pasado un rato empezó a hablar en voz más alta, y hasta que grito. Basta ya de fingir, malvados nos dijo, confieso que lo mate, levanten los tablones, ahí donde late su horrible corazón.

Inmediatamente lo arrestamos, lo metimos en la parte de atrás de la patrulla, se fue maldiciendo y ese fue su triste final para alguien tan frío como él.